
Sé que pude haber partido en vano tan temprano, pero cada vez que toco el cielo con las manos
me acuerdo de ti.
Entre tu risa y lo mejor de mi se eleva un puente que recorrimos infinitas veces dulcemente. No te asombres si me ves regresar con el alma llena de tus sueños, ya no hay dudas fue cuestión de suerte, conocerte, y te cuento que en cualquier lugar donde me encuentre me pierdo por ti.